A veces, después de consumir bebidas alcohólicas, nos duele el estómago, pero ¿por qué? El alcohol tiene un efecto irritante en la mucosa del estómago y favorece la secreción de ácido, lo que puede provocar náuseas, malestar estomacal o incluso diarrea. ¡Síntomas muy similares a la gastroenteritis!

Las similitudes entre la gastroenteritis y la resaca

La ingestión de alcohol lleva su movimiento hacia el estómago. En presencia de alimentos en el estómago, el alcohol se absorberá con los nutrientes de la comida por las células de la pared del estómago. Este fenómeno ralentiza la digestión del alcohol.

En el caso de que no hayas comido, el alcohol continuará su viaje hasta el intestino delgado, donde también atravesará las células de la pared intestinal, pero de manera mucho más acelerada. Esto explica por qué te sientes más excitado y rápidamente cuando bebes en ayunas.

Los científicos han observado que consumir pequeñas cantidades de alcohol tiene el efecto de acelerar el ritmo de la digestión, lo que provoca los siguientes síntomas similares a la gastroenteritis:

• Diarrea,
• Calambres abdominales;
• Náuseas;
• Des-hidratación
• Vómitos.

La gastroenteritis es en principio el resultado de una infección, pero también puede deberse a la ingestión de toxinas.

Habrá entendido que los dolores de estómago pueden deberse simplemente a la resaca y otras veces, podría tratarse de una gastroenteritis.

Cómo evitar la diarrea causada por el alcohol

• Si sufres de diarrea durante o después de consumir alcohol, lo primero que debes hacer es dejar de beber hasta que tu digestión vuelva a la normalidad. Si vuelves a beber, ten en cuenta que la diarrea podría regresar.
• Consume alimentos fácilmente digestibles para calmar tu estómago.
• Bebe una gran cantidad de líquidos claros, como agua, caldo y jugo, para compensar la pérdida de líquidos debido a la diarrea.
• Evita consumir los siguientes alimentos:

- Alimentos ricos en fibra

- Productos lácteos

- Alimentos ricos en grasas

- Alimentos muy picantes o condimentados

Y finalmente, ¡prueba la solución HANG-OVER!

A menudo recomendado en farmacias para remediar eficazmente los síntomas más comunes de la resaca gracias a su fórmula única y natural, HANG-OVER también actúa en la reducción de náuseas y vómitos y en el malestar digestivo gracias a la combinación de la vitamina B6 y el jengibre.

Para obtener una eficacia óptima, aquí tienes las diferentes posologías según los síntomas:

• Preventivo: 1 a 2 tabletas antes de dormir y 1 a 2 al despertar, ajustado según la gravedad de los síntomas y el nivel de consumo.
• Curativo: 2 tabletas de inmediato y 2 más 12 horas después.

Disolver en un vaso grande de agua (50 cl).

Para obtener más detalles, consulta con tu farmacéutico.