La melissa officinalis L. comprende más de 20,000 especies vegetales y se utiliza en diversas medicinas tradicionales en todo el mundo. [1]
Esta planta se utiliza tradicionalmente contra enfermedades mentales y del sistema nervioso central, problemas cardiovasculares y respiratorios, varios tipos de cáncer, así como estimulante de la memoria, tónico cardíaco, antidepresivo, somnífero y antídoto. [2,3,4,5,6,7]
Las investigaciones fitoquímicas sobre M. officinalis han revelado la presencia de diversos productos fitoquímicos, incluidos terpenos como el ácido rosmarínico (monoterpenos, sesquiterpenos y triterpenos) y compuestos fenólicos (ácidos fenólicos, flavonoides y taninos). [8,9] Los principales componentes activos de M. officinalis son compuestos volátiles (por ejemplo, geranial, neral, citronelal y geraniol), triterpenos (por ejemplo, ácido ursólico y ácido fólico) y compuestos fenólicos (por ejemplo, isómeros cis y trans del AR, derivados del ácido cafeico, luteolina, naringina y hesperidina) [10,11,12]
Rol
Los resultados de un estudio piloto abierto prospectivo (en voluntarios estresados con trastornos de ansiedad leves a moderados y trastornos del sueño) mostraron que la administración oral de Cyracoss (un extracto patentado y estandarizado de hojas de M.officinalis que contiene más del 7 % de AR y 15 % de derivados de ácido hidroxicinámico) a una dosis de 600 mg/día durante 15 días reduce significativamente las manifestaciones de ansiedad en un 18 %, mejora los síntomas asociados a la ansiedad en un 15 % y disminuye la insomnia en un 42 %. [13]
Estos resultados nos demuestran que la melisa es un ingrediente interesante en el manejo de la veisalgia.